Enseñar a comer.
La estrategia que presentamos a continuación, basada en el llamado Método Estivill, se puede aplicar cuando se haya tomado la decisión de enseñar a comer al niño/a. Por ejemplo cuando el pequeño no quiere comer una determinada comida y pida que se le haga otra diferente, cuando juegue con la comida sin comérsela, cuando se niegue a comer, etc. Hay que tener presente que para él supondrá un gran esfuerzo y se resistirá a comer al principio. Como en otras muchas situaciones, una actitud tranquila y firme es fundamental para ayudar al niño/a a superar este momento.
1.- Establecer un sitio, una hora y una rutina (lavarse las manos, ayudar a poner la mesa, etc) La comida debe desarrollarse de la misma manera, a la misma hora, en el mismo lugar y con una serie de objetos que siempre se asocien al hecho de comer (babero, plato, cubierto, vaso, etc)
2.- Sentar al niño/a cuando la comida esté preparada, nunca antes.
3.- Ayudarle a llevarse la comida a la boca. Si cierra la boca o rechaza la comida, se deja el cubierto con tranquilidad y se intenta de nuevo pasados un par de minutos.
4.- Repetir lo mismo tres o cuatro veces más.
5.- Si no quiere comer, retirar el plato y permitirle que se vaya sin hacer ninguna alusión a la comida. Mientras, ponerse a hacer otra actividad distinta.
Pasados tres minutos, repetir desde el paso 2. Si no come, volver a retirar el plato y permitirle que se vaya como si hubiera comido bien. Dedicar esta vez cuatro minutos a realizar otra actividad.
Retomar el método desde el paso 2 con mucha tranquilidad, en intervalos de cinco minutos. Si no come retirar el plato como si lo hubiera hecho y no decirle nada al respecto. Eso sí, hay que ocuparse de que no coma nada hasta la siguiente comida. Puede beber cuanta agua quiera, pero sólo agua.
No hay que preocuparse si la primera vez no obtenemos el resultado deseado. Se está aplicando un método para reeducar comportamientos mal aprendidos y es muy dificil dejar de hacer las cosas como uno las ha hecho siempre para empezar a hacerlas de otra manera.
ATENCIÓN: A través del tono de voz el niño/a interpreta el estado de ánimo de los padres y madres. Éstos deben estar seguros/as de lo que hay que hacer y demostrarlo.
NO SE DEBE APLICAR ESTA ESTRATEGIA...
1.- Cuando el niño/a sea menor de seis meses
2.- En el caso de que exista cualquier trastorno alimentario o de salud.
3.- Si no mastica o no traga
4.- Cuando existe pérdida de peso o cualquier otro síntoma que deba ser revisado por el pediatra.
5.- Bajo circunstancias susceptibles de estrés para el niño/a, como un cambio de colegio, una mudanza o la llegada de un nuevo hermano.
Sabemos que llevar a cabo esta técnica, en un principio puede llevarnos algo de tiempo y dedicación, pero para crear rutinas debemos ser constantes. Realizarlo en días en los que sepáis que no vais a tener que dejarlo a medias, es decir si sabéis que tenéis que realizar otras tareas ineludibles. El hecho de realizarlo en días consecutivos nos facilitará la tarea.